Trastornos de la Conducta Alimentaria

Trastorno por Atracón. El TCA más común entre la población

26 de Diciembre, 2018 Paula Gadea Téllez

El Trastorno por Atracón es un trastorno de la Conducta Alimentaria, como la Anorexia y la Bulimia. A diferencia de estas últimas, es más frecuente entre la población, ya que afecta a entre el 1 y el 4% de esta. En cuanto al género de quienes la padecen, un tercio son hombres. En lo que se refiere a la edad, en contraposición a la Anorexia y la Bulimia, el rango es más amplio, pues va desde la adolescencia hasta la mediana edad.

 

¿Qué es el Trastorno por Atracón?

El Trastorno por Atracón tiene en común con la Bulimia Nerviosa el impulso irrefrenable por comer, pero no se imponen las conductas extremas del control del peso, es decir, no vomitan, no practican un ejercicio excesivo, no hacen uso de laxantes o diuréticos,… No obstante, el malestar corporal, la obsesión por la comida y el peso están igualmente presentes y de forma grave en el día a día de la persona.

 

La poca conciencia respecto al problema hace que estas personas recurran una y otra vez a intentos disfuncionales de solucionar el problema, dietas fallidas, control del peso en la báscula, que buscan recuperar el control sobre la comida y que, paradójicamente, lo empeoran a largo plazo.

 

Es un trastorno mental grave que origina graves dificultades en la funcionamiento individual de la persona y que, además, es vivido con culpa y vergüenza, que obliga a la persona a esconder estos comportamientos disfuncionales y que, por tanto, sea más difícil que estas personas acudan a pedir ayuda a un recurso especializado.

 

Síntomas

  • Episodios recurrentes de ingesta compulsiva objetiva. Se caracterizan por cantidades que son claramente superiores que las que la mayoría de personas ingieren.
  • Los atracones se asocian a las siguientes características: comer mucho más rápido de lo normal, comer hasta sentirse desagradablemente lleno, sin hambre, en ocasiones en solitario por la vergüenza que sienten por la ingesta y sentirse disgustados con ellos mismos, deprimidos y avergonzados.
  • Malestar intenso respecto a los atracones.
  • Los atracones se producen mínimo una vez por semana, durante al menos tres meses.
  • No aparecen conductas compensatorias inapropiadas como en la Bulimia Nerviosa.

 

 

Causas

Solemos encontrar con este tipo de trastorno a mujeres de mediana edad con cierta preocupación por su figura y que durante su vida han seguido dietas, con frecuencia no supervisadas por especialistas.

 

Durante la realización de estas dietas o restricción es cuando suele aparecer, en consecuencia, el craving o necesidad de ingerir alimentos. Los atracones suelen darse con aquellos alimentos que han sido prohibidos, principalmente dulces, y suelen ingerirse sin control grandes cantidades de alimentos en una sola comida. La persona entonces se siente terriblemente culpable, frustrada y triste y suele ser un motivo para abandonar la dieta.

 

La razón por la que hay personas que siguen continuamente dietas sin éxito suele ser porque se ha recurrido a la comida para paliar un malestar interno o para afrontar el aburrimiento, la soledad, la sensación de vacío,… No obstante, cuando esto se escapa de la conciencia de la persona, suele aparecer un sentimiento de fracaso ante la imposibilidad de bajar de peso y acabar recurriendo una y otra vez a los atracones.

 

Factores de riesgo

La realización de dietas y la tendencia a restringir en la alimentación son unos de los factores que hacen más probable la aparición de este tipo de trastorno, así como el sobrepeso o la obesidad también se relacionan con un mayor riesgo.

 

Por otro lado, suele existir una insatisfacción con la imagen corporal, ligada a autocríticas frecuentes sobre la imagen o el peso. Esta relación con el cuerpo puede ser consecuencia de experiencias traumáticas en la infancia como el bullying y suele ser común constantes fluctuaciones en el peso, o el sobrepeso durante la infancia como antecedente.

 

La presencia de desórdenes alimentarios en la familia, las dietas, preocupación por la imagen y el peso y la obesidad son factores de riesgo, así como la tendencia al aislamiento, poco apoyo en el entorno, baja autoestima y dificultad para la identificación y expresión de las propias necesidades.

 

Tratamiento

Al igual que en todos los Trastornos del Comportamiento Alimentario, se requiere una intervención multidisciplinar. Es de gran importancia no solo hacer un seguimiento nutricional y médico de la persona, sino también ofrecer una ayuda mediante la psicoterapia y la psicofarmacología, si fuera necesario. La no realización de este tipo de tratamiento integral suele desembocar en constantes recaídas que agravan aún más el problema. La adicción a la comida en el Trastorno por Atracón puede ser comparable a la adicción a sustancias y, por tanto, el riesgo a las recaídas es alto.

 

Realizando un abordaje global del problema nos permite no solo tratar las conductas perjudiciales relacionadas con la comida y el peso, sino también los problemas asociados que las han provocado y, de esta forma, se reduce la probabilidad de que reaparezca.

 

Prevención

Un mayor conocimiento acerca del Trastorno por Atracón puede dotar a las personas una explicación acerca de lo que les ocurre y hacer más probable que pidan ayuda. Es importante la coordinación con el resto de profesionales, nutricionistas y médicos, para su detección, así como el seguimiento en las escuelas.

 

La promoción de hábitos alimentarios y de vida saludables supone un factor de protección que previene la aparición de un Trastorno por Atracón, así como la educación emocional y dotación de recursos para gestionar y resolver problemas.

 

En los centros Ita especialistas en salud mental somos expertos en el tratamiento de los Trastornos de la Conducta Alimentaria. Podemos Ayudarte.

 

Psicóloga General Sanitaria y especialista en el tratamiento de los 
Trastornos del Comportamiento Alimentario y Obesidad.
Terapeuta en Hospital de Día de TCA en Tarragona.