Salud Mental

Hábitos saludables

15 de Marzo, 2020 María Victoria Muñoz Hernández

Cuando hablamos de hábitos de vida saludable hacemos referencia al conjunto de comportamientos cotidianos que condicionan nuestra salud, para bien o para mal.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda adoptar un estilo de vida saludable de por vida, a fin de mantenerse sano; mental, física y socialmente, el mayor tiempo posible y llegar al vejez con la mayor calidad de vida posible.

 

Podemos diferenciar varios factores a tener en cuanta si queremos mantener unos hábitos de vida saludables:

 

1- Dieta saludable: Independientemente del patrón alimentario que sigamos por razones éticas o religiosas, en una alimentación saludable estarán presentes todos los macronutrientes (Hidratos de carbono, grasas y proteínas) y micronutrientes (vitaminas y minerales) necesarios para un correcto funcionamiento de nuestro organismo previniendo además, futuras enfermedades no transmisibles.                                                                                   

Necesitamos los macronutrientes para obtener energía para el desarrollo de todas las funciones vitales, además, reparan, construyen tejidos y regulan procesos metabólicos.                                                                       

Los micronutrientes son esenciales para el correcto desarrollo de funciones metabólicas y fisiológicas de nuestro organismo.                                                                                       

Debemos ingerir entorno a 30-40 Kcal por kilo de peso. Aunque de forma general se nos ha expuesto una distribución energética muy estática; 50-55% de energía de HC, 30-35% de la energía de grasas y 20-25% de proteínas, debemos prestar atención a las necesidades nutricionales especificas de cada grupo de población en función de su estado de salud y su actividad física.

Otra cuestión a la que la OMS hace especial hincapié es a un correcto estado de hidratación. La recomendación es beber entre 2 y 3 litros diarios que cubrirían las necesidades de nuestro organismo.

2- Hábitos nocivos a evitar: drogas, alcohol y tabaco repercuten de forma muy negativa en nuestra salud por múltiples factores.

 

3- Higiene personal: una correcta higiene nos evitará padecer infecciones y patologías diversas, derivadas de una falta de limpieza tanto doméstica como personal.

 

4-Actividad física: La OMS declaró que para mantener un optimo estado de nuestro sistema musculo-esquelético estable y fuerte, debemos practicar al menos 60 minutos diarios de actividad física moderada o intensa para menores de edad y 150 minutos semanales de actividad física moderada para adultos.

Además, un estilo de vida activo ayuda a mantener un equilibrio energético entre la energía que ingerimos y la gastada.

La actividad física ayuda a prevenir enfermedades no transmisibles como la hipertensión, hipercolesterolemia o la diabetes.

 

5- Contaminación ambiental: La exposición a productos tóxicos presente en el aire que respiramos de muchas zonas del planeta, repercute negativamente en la salud, pudiendo causar enfermedades como neumonía o cáncer entre otras.

 

La contaminación ambiental no afecta a todos los individuos por igual, los grupos de población que mas acusan estas consecuencias son las personas que ya estaban enfermas, niños, ancianos, familias de pocos ingresos y personas con un acceso limitado a asistencia médica.

 

6- Equilibrio mental: se refiere al estado de bienestar emocional y psicológico, que se necesita para mantenerse de manera estable y desarrollar las capacidades cognitiva, relaciones sociales y el desarrollo en definitiva de la vida diaria. Alarmas como la irritabilidad, estrés, ansiedad entre otras muchas nos estarían indicando que la persona en cuestión pasa por un momento de inestabilidad y que quizás su salud mental esté alterada.

 

7- Actividad social: el ser humano es un animal que se desarrolla dentro de una sociedad, este es un aspecto es fundamental a tener en cuenta para el correcto estado de salud de un individuo. Un aislamiento acarrearía problemas a muchos niveles para la persona.

 

 

 

 

 

 

Bibliografía:

  1. OMS, Serie de Informes Técnicos 916. Dieta, Nutrición y prevención de enfermedades crónicas.

 

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5. Interventions on diet and physical activity: what works: summary report. Ginebra, Organización Mundial de la Salud, 2009.

 

6. Preventing noncommunicable disease in the workplace through diet and physical activity. Informe OMS/Foro Económico Mundial sobre un encuentro conjunto. Ginebra, Organización Mundial de la Salud, 2008.

 

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8. Montero JC, Mirón IJ, Díaz J, Alberdi JC. Influencia de variables atmosféricas sobre la mortalidad por enfermedades respiratorias y cardiovasculares en los mayores de 65 años en la Comunidad de Madrid. Gac Sanit 1997; 11:164-70.

 

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10. Helen Herman, Eva Jané-Llopis. Mental health promotion in public health. https://doi.org/10.1177/10253823050120020107.

 

Nutricionista de Ita Sevilla ABB Vidrio

Diplomada en Nutrición Humana y Dietética