Salud Mental

La importancia del GRUPO en el tratamiento

30 de Julio, 2020 Oriol Rodríguez

Dice un proverbio africano que “Si quieres ir rápido, camina solo. Si quieres llegar lejos, ve acompañado”. Recordando algunas de las mejores historias que recuerdo (ya sea en el cine, la literatura o a nivel más personal), me costaría mucho encontrar una sola en la que el héroe consiga superar sus dificultades y reclamar lo que “le pertenece” sin ayuda de un séquito de personas que le sirven como apoyo, espejo o contrapunto.

 

Aplicar esta idea al trabajo que realizamos, me lleva a pensar en la idea de EL GRUPO como uno de los elementos más importantes y preciados en un proceso terapéutico. Estar en un grupo implica abrir un espacio donde uno puede darse permiso para experimentar otras formas de ser y relacionarse con uno mismo y con los demás en un entorno seguro, con la certeza de que lo que yo “ponga” en ese grupo me será devuelto en forma de respeto, afecto y reconocimiento. Y sentir que mis cambios son reconocidos y cuidados por los demás me ayuda a poder cuidarme mejor a mí y a los demás.

En el trabajo con adolescentes con dificultades, son muchas las veces que uno oye hablar de lo que SOY como una idea muy relacionada con el / los diagnósticos. Poder compartir mis vivencias en un espacio donde hay personas que comparten estas etiquetas hace que el “cómo” vivo mi realidad tenga más peso y adquiera más matices que, simplemente, vivirlas y explicarlas a través de mi diagnóstico. De esta forma, estar en un espacio donde los demás me vean por cómo soy más que por lo que soy es algo que puede empoderarme y hacerme entender mi realidad de una forma mucho más rica y real.

 

Otro de los puntos que creo que es interesante poner de manifiesto es la idea de que en un grupo de personas siempre existen distintas dinámicas que pueden generar situaciones incómodas. Así, como persona tengo que asumir que no todos mis compañeros van a caerme bien (y posiblemente, yo tampoco a ellos. Pero esto ya es algo más difícil de ver…), que no siempre voy a sentirme comprendido (lo que quizás me obliga a tener que explicarme mejor o ser más claro en mis ideas) o que alguien no estará de acuerdo en cómo tomo según qué decisiones y/o responsabilidades (lo que me obliga a intentar entender el otro, su punto de vista y qué parte de razón tiene en lo que me dice). Todas las situaciones descritas anteriormente me van a ayudar a desarrollar nuevas habilidades con las que poder enfrentarme a mi vida adulta y a los desafíos que ésta plantea

 

Del mismo modo, el grupo también es un espacio donde celebrar los distintos avances y cambios que las personas sufren a lo largo de su proceso. Ver a otros conseguir lo que yo quiero o necesito para mí, es algo que puede darme el valor para intentarlo mejor y  hace que me sienta partícipe del éxito del otro. Y, del mismo modo, cuando sea yo el que pueda celebrar mis éxitos, me recuerda que no llegué hasta aquí solo, sino con la ayuda y el apoyo de mis compañeros.

Psicólogo de Ita Anglí