Trastornos de la Conducta

¿Por qué los jóvenes están desmotivados con el futuro?

11 de Julio, 2021 Jesús Marchan

En una miscelánea de cuestiones entre las que podemos encontrar: paro juvenil, crisis económica, situación pos pandémica —y pandémica—, escaso consumo de cultura entre jóvenes —y adultos—, podemos responder a la pregunta del encabezado, pero estas, no son más que situaciones o circunstancias que provocan una mezcla de miedo y desmotivación que se traduce en una huida al presente.


La cuestión sería bicéfala en tanto a que, no solo tienen desmotivación en el futuro, sino que su principal motivación es el inmediato presente. Puede parecer una obviedad, pero este binomio, unido a que se esté desdibujando el esfuerzo y el sacrificio del vocabulario y de la praxis de algunos jóvenes —y de algunos adultos—, provoca una mirada dolorosa hacia el futuro que se plantea como una etapa donde todas las obligaciones y todos los sacrificios que se están eludiendo en el presente caerán como una losa. Además, tenemos que tener en cuenta, la dificultad que supone distraerse de los elementos tan numerosos que dan placeres tan instantáneos como son los móviles, las videoconsolas o las plataformas de emisión en streaming. Siempre será más fácil, pulsar un botón que encienda un aparato que te sumerge en otro mundo y te provoque satisfacciones sensoriales instantáneas, que, por ejemplo, abrir un libro y pensar que cada página que estudio me ayudará a aprobar unos exámenes que en un futuro me abrirán un camino hacia mi objetivo profesional. Esta es una de las diatribas en las que se encuentran no sólo los jóvenes, sino la sociedad en su conjunto en estos momentos, la elección entre la inmediatez o la inversión .


Llegados a este punto tenemos que ser conscientes que el futuro que espera no es demasiado esperanzador, que puede reforzar la idea de abandonarnos al presente, y dejar al futuro correr. Pero es aquí, donde entra en escena la tarea de todos los que tenemos competencias en la educación de los jóvenes —familias, docentes, educadores,
psicólogos, voluntarios entre otros—, tenemos que hacerles conscientes de la tormenta que se avecina en el horizonte, pero otorgándoles herramientas que les ayuden a capear el temporal. Sería un grave error maquillar un futuro turbulento, ya que podríamos provocar frustración cuando se topen de bruces con una realidad muy distinta a la que le hemos preparado.

 

Todos los que trabajamos con jóvenes tenemos la tarea de hacerles ver las recompensas del esfuerzo, mostrarles como el paso que se da el primer día es tan importante como el que se da en el último. Nosotros, tenemos que enseñarles la utilidad del sacrificio, como la satisfacción de acabar un trabajo en el que has dedicado esfuerzo y sacrificio te puede sacar una sonrisa a pesar del cansancio. Pero todo esto no se puede quedar en teoría, tiene que pasar a una práctica auténtica en la que eduquemos siempre desde el ejemplo. No podemos pedirles una motivación que no tenemos ni nosotros mismos, para ilustrar lo expuesto podemos rescatar la cita de Rosa Parks —símbolo de la lucha por los derechos de los afroamericanos en EEUU— “Cada persona debe vivir su vida
como un modelo para otros”. Tenemos la responsabilidad de ser una de las principales fuentes que nutrirán su esperanza en un futuro al que llegarán tanto ellos como nosotros.

Profesor de ACUDE Málaga Grupo Ita