Trastornos del Neurodesarrollo

¿Evaluación Neuropsicológica, qué es y por qué?

11 de Agosto, 2024 Esteve Montasell Jordana

La evaluación neuropsicológica constituye un proceso mediante el cual se determina el estado cognitivo y afectivo-conductual de un individuo, utilizando modelos teóricos, pruebas estandarizadas, entrevistas, cuestionarios y escalas psicológicas. Este tipo de evaluación no se limita únicamente a personas que presentan enfermedades o daños neurológicos, sino que también se aplica en contextos relacionados con individuos que padecen trastornos o patologías psiquiátricas (Tirapu, 2007). 
 
Generalmente, el proceso de evaluación inicia con la revisión de informes previos, cuya información resulta fundamental para establecer la gravedad y naturaleza de la disfunción, así como para analizar los resultados de las técnicas de neuroimagen, la presencia de complicaciones asociadas, la evolución de la sintomatología y el nivel de dependencia o recuperación alcanzado hasta el momento. 
 
La información recopilada durante la evaluación neuropsicológica permite elaborar un perfil que refleja las fortalezas y debilidades en relación con las capacidades cognitivas de una persona en un momento específico. 

Una evaluación adecuada es fundamental para garantizar una intervención efectiva en el tratamiento, adaptándose a las necesidades del profesional de referencia. Los componentes esenciales de la exploración neuropsicológica incluyen: 

 

  • El estudio sistemático como base principal. 
  • La historia clínica o anamnesis. 
  • La observación y la aplicación de las pruebas necesarias. 
  • La flexibilidad, profesionalismo y experiencia del examinador. 

Antes de seleccionar los instrumentos de evaluación a utilizar, es necesario establecer una serie de criterios fundamentales. Entre estos aspectos se encuentran la ética, la fiabilidad, la validez y la sensibilidad de la práctica clínica. También se deben considerar la viabilidad de la administración, la validación de las pruebas, así como sus datos normativos y su aplicación. 
 
La exploración o evaluación neuropsicológica examina, de manera general, diversas facetas en función de las necesidades y del análisis previo realizado. 

 

Evaluación de la Memoria 

Las pruebas empleadas en la evaluación de la memoria pueden consistir en escuchar atentamente historias narradas por un profesional de la neuropsicología para luego reproducirlas con el máximo detalle posible. Otras pruebas se basan en la memorización y posterior recitación de listas de palabras. En cuanto a la memoria visual, las pruebas pueden incluir recordar imágenes o reproducir un dibujo de memoria. 

 

Evaluación del Lenguaje 

Dependiendo de la modalidad del lenguaje que se desee explorar, se utilizarán pruebas verbales o escritas. Entre estas, existe una amplia variedad: algunas pruebas consisten en denominar objetos o imágenes presentadas, mientras que otras implican describir una escena representada en una lámina. También existen pruebas que requieren repetir palabras, escribirlas al dictado, explicar lo comprendido de un texto determinado o seguir unas órdenes dadas, entre otros ejemplos. 

 

Evaluación de la Atención 

El especialista en neuropsicología puede solicitar, por ejemplo, que se tachen o marquen unos símbolos específicos de entre una gran variedad, o que se siga una secuencia determinada. También tareas que sean de un modo continuo y de largo recorrido para ver como se sostiene la atención en periodos más largos. 

 

Evaluación de las Funciones Ejecutivas 

La diversidad de pruebas en la evaluación de las funciones ejecutivas es muy amplia. Algunas pruebas pueden consistir en realizar rompecabezas, ejercicios de lógica, resolver problemas de tipo aritmético o aplicar el razonamiento en distintas situaciones hipotéticas. 

 

Evaluación de las Praxias 

Las praxias son habilidades motoras que permiten alcanzar un objetivo mediante la ejecución adecuada y metódica de órdenes del cerebro. Para su evaluación, se pueden emplear tareas de copia o reproducción de dibujos sencillos, ciertas actividades manipulativas o la ejecución de gestos y movimientos específicos. 

 

Evaluación de las Gnosias 

Las gnosias se refieren a las capacidades que permiten reconocer lo que percibimos a través de los sentidos. Para su evaluación, se utilizan diferentes pruebas que valoran la integridad del reconocimiento de objetos, imágenes, sonidos, entre otros. 

 

Evaluación de las Actividades de la Vida Diaria (AVD) 

Otros aspectos a evaluar incluyen las Actividades de la Vida Diaria (AVD), que explican el comportamiento y su impacto funcional. Para ello, se suele recurrir a escalas y cuestionarios administrados mediante una entrevista o de forma autorrellenable, según los casos, ya sea a la persona afectada, a un allegado, o a ambos. 

 

Posterior a la Evaluación 

Una vez realizada la evaluación neuropsicológica, se siguen diversas fases generalizadas para llevar a cabo una intervención adecuada: 

  • Devolución de los Resultados: Comunicación de los resultados obtenidos en la evaluación tanto a la persona evaluada como a su familia o personas implicadas en su vida diaria, si es necesario. 
  • Definición de Objetivos y Plan de Tratamiento: Establecimiento de objetivos específicos y elaboración de un plan de tratamiento personalizado. 
  • Rehabilitación Neuropsicológica y Seguimiento: Implementación del plan de tratamiento y monitorización continua de los progresos. 
  • Valoración de los Resultados de la Intervención: Evaluación de los resultados obtenidos tras la intervención para determinar su efectividad. 

 

¿Cuándo se Puede Necesitar una Evaluación? 

Siempre que se dé una estabilidad psicopatológica (un estado anímico adecuado) y una colaboración y predisposición a realizar las pruebas se pueden dar distintos escenarios  en las que puede ser necesaria una evaluación neuropsicológica: 

  • Información inexplicable por otras hipótesis diagnósticas: Cuando el profesional responsable del caso detecta información sobre la persona que no puede ser explicada por otras hipótesis diagnósticas o características de personalidad. 
  • Incongruencias en el rendimiento diario: Cuando hay una discrepancia entre el rendimiento diario de la persona en su entorno habitual y el relato de otros informantes, como el centro educativo, el lugar de trabajo, la familia o la pareja. 
  • Empeoramiento del funcionamiento cognitivo: Cuando se percibe un empeoramiento o declive en el funcionamiento cognitivo de la persona en los últimos 3-6 meses, manifestado por mayor despiste, olvidos frecuentes, indefensión aprendida reciente o incapacidad para realizar tareas cotidianas. 
  • Seguimiento o revaluación recomendada: A raíz de informes previos u otras evaluaciones neuropsicológicas o psicológicas, se recomienda realizar un seguimiento o una revaluación tras un periodo determinado. 
  • Diagnósticos específicos y tratamientos inefectivos: Cuando personas con ciertos diagnósticos no responden adecuadamente a los tratamientos psicoterapéuticos o farmacológicos, se puede necesitar una evaluación adicional para ajustar el tratamiento. 

 

Para cualquier duda recomendamos contactar con su profesional de referencia o contactar directamente con el Servicio de Neuropsicología del centro. 

 

Referencias 

Martín-Lobo, P. (2015). Procesos y programas de neuropsicología educativa. Secretaría General Técnica. Centro de Publicaciones. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte. https://sede. educacion.gob.es/publiventa/procesos-y-programas-de-neuropsicologia-educativa/ensenanza-neurologia/20612 

Méndez, P. (2009). Evaluación neuropsicológica. Anales de Pediatría Continuada, 7(1), 50–54. https://doi.org/10.1016/S1696-2818(09)70452-4 

Tirapu Ustárroz, Javier. (2007). La evaluación neuropsicológica. Psychosocial Intervention, 16(2), 189-211.http://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1132-05592007000200005&lng=es&tlng=es 

Neuropsicólogo. Coordinador del Servicio de Neuropsicología en ITA Salud Mental.

Contacta con nosotros