La intervención asistida con animales se define como aquella actividad planificada, que se ayuda de la participación de animales y sus respectivos profesionales especializados y de una intervención organizada, con el objetivo de una mejora terapéutica. Hablamos de unos animales entrenados y guiados por profesionales del ámbito, que junto a toda una intervención estructurada tienen un impacto en los ámbitos de la salud, la educación y de lo social.
En la búsqueda de una recuperación integral de la persona, como profesionales especialistas en salud mental, tenemos la responsabilidad de trabajar con las metodologías, estrategias y herramientas más adecuadas, para paliar las dificultades y mejorar la calidad del tratamiento de nuestros usuarios. La incorporación de las intervenciones asistidas con animales en nuestros procesos terapéuticos, ofrecen un salto cualitativo en nuestro tratamiento y en el desarrollo global de la persona, que acaba influyendo en su calidad de vida. Así lo relata una de las participantes:
“Asistir a las Intervenciones asistidas con perro es una oportunidad de afrontar de otra manera las dificultades que tenemos y una manera de conectar con las cosas bonitas de la vida, fuera del centro y de la enfermedad. Un descanso que me permitía desconectar de mis pensamientos y de todo lo malo para poder centrarme en mí y en el perro.”
Desde mi propio bagaje profesional en Ita Argentona y gracias al trabajo con la entidad ITCAN Intervenciones asistidas con perro, podemos valorar muy positivamente la implementación de las distintas intervenciones que se llevan a cabo. Así lo afirma otra de las participantes:
“Era un momento muy divertido y, creo que hablo por todos mis compañeros, que era un espacio en el que disfrutábamos al máximo. Aprender muchísimo sobre diversos aspectos de los perros nos permite conectar más con ellos. Podemos sentir su cariño, entender cómo cuidarlos, identificar su comportamiento y nos transmiten una pequeña motivación para salir adelante.
Personalmente, me ayudó mucho en ese aspecto ya que asistí en un punto en el que estaba muy estancada en el tratamiento y no veía que esto fuera a cambiar, pero gracias a que pude conocer estas intervenciones, me dio una pequeña motivación para avanzar.”
Es alrededor de un 80% de los participantes que realizan este programa que experimentan mejoras a nivel cognitivo, emocional, social y conductual, después de participar en estas intervenciones, creadas, guiadas e implementadas por Beth Mussull y Claudia Senserrich. El porcentaje aumenta cuando hablamos del nivel de satisfacción de los participantes del programa, alrededor de un 98% del total.
Las evidencias científicas han demostrado en numerosas ocasiones los beneficios que aportan los animales en una relación humano-animal respetuosa. Cuando a estas potencialidades se les añade una intervención estructurada y planificadas con objetivos terapéuticos, lúdicos o educativos, estos beneficios aumentan exponencialmente.
Cuando hablamos de los beneficios de la intervención asistida con animales, nos encontramos con un amplio abanico de beneficios:
- Motivación por el propio aprendizaje terapéutico de una forma vivencial y significativa
- Mejora de la empatía
- Mejora de las habilidades sociales
- Buen trato con el grupo de iguales
- Mejora la convivencia con el resto de compañeros
- Estimula las emociones
- Refuerza el contacto con la naturaleza
- Facilita la comunicación
- Promueve la responsabilidad y el autocuidado
- Reduce la sensación de soledad y depresión
- Mejora la autoestima
En conclusión, nos encontramos con unas intervenciones altamente beneficiosas que proporcionan herramientas saludables para la recuperación integral de los participantes. Unas intervenciones asistidas con animales que aportarán su granito de arena en el proceso terapéutico de nuestros pacientes.
