Trastornos de la Conducta

Síndrome del niño emperador. Cuando dárselo todo se vuelve en su contra

13 de Abril, 2019 Daniele Cipriano

Cada vez las familias tienen menos hijos y se desviven para que estos tengan “lo mejor”, aquello que sus padres no han tenido. Se depositan en ellos todas las expectativas bajo la creencia de que dándoselo todo llegarán a ser aquello que sus padres no lograron ser. El hijo o la hija se convierte en el centro del “universo” familiar y, a largo plazo, adquiere un rol de superioridad respecto a los miembros de la familia que le dificulta la relación con los demás. Esto le puede causar problemas en diversos ámbitos, como el colegio o las amistades.

 

En la sociedad actual cada vez tenemos menos hijos y estos adquieren mucha importancia. Son los llamados “hijos del deseo”. probablemente están muy preparados para las tareas que deberán desempeñar en la vida adulta; pero poco preparados en cuanto a habilidades emocionales y sociales.

 

 

Acostumbrados a ser el “centro del universo”, se convierten en la persona más importante de la familia y lo que a priori podría considerarse como algo positivo, se convierte en algo negativo para él y para su entorno. El niño se transforma en un pequeño tirano incapaz de reconocer los sentimientos de las personas de su entorno y de respetar sus necesidades. Incapaces de tener empatía.

 

A la larga, esto le causa un gran sufrimiento y frustración, ya que fuera del núcleo familiar la situación es muy diferente, ya no es el centro de todo. Esto, como señala el Psiquiatra Enric Armengou, puede producir situaciones psicopatológicas en la adolescencia como depresión, ansiedad, consumo de sustancias o dificultades para la adaptación, lo que se conoce como "Trastorno de la Conducta". Hechos que se producen cuando topan con la cruda realidad.

 

 

¿Cuáles son las causas?

  • En la sociedad actual, padres y madres pasan menos tiempo del que creen necesario con sus hijos. Esto crea un sentimiento de culpa que tienden a paliar con caprichos.
  • Falta de límites. A veces padres y madres “no quieren tener problemas” con sus hijos y les conceden todo lo que desean. Esta falta de límites crea una sensación de impunidad en el menor, que se cree capaz de hacer lo que le plazca cuando le plazca, situándolo fuera de la realidad con la que se va a encontrar.
  • Depositar excesivas expectativas en tu hijo o hija. Sobre todo en el ámbito del rendimiento académico, social y deportivo.

 

Pautas que nos pueden ayudar

  • Pon normas y límites
  • Crea un espacio de diálogo con tu hijo o hija
  • Practica la empatía. Promueve la capacidad de entender qué siente la otra persona
  • Fomenta la cultura del esfuerzo
  • Evita las actitudes violentas, la violencia no debe ser la norma ni el medio para conseguir un fin. Padres y madres deben ser un ejemplo.
  • Revisa las expectativas que depositas en tu hijo o hija

 

Somos especialistas en el tratamiento de adolescentes que presentan Trastornos de Conducta; que generan situaciones conflictivas en el entorno familiar, escolar y social. Podemos ayudarte.

 

Imagen | Unsplash

Psicólogo clínico especialista en Trastornos de la Conducta, Adicciones, Psicoterapia de la Adolescencia y Terapia Familiar.

Coordinador Científico Especialista en Trastornos de Conducta en ITA Salud Mental.