Mindfuleating es “comer con conciencia plena”, es decir, comer con todos los sentidos puestos en el acto de alimentarse, la vista, el olfato, el gusto, el tacto, el oído e incluso las sensaciones interoceptivas, aquellas que proceden de nuestros órganos internos, como por ejemplo el hambre o la saciedad. Se trata de un nuevo enfoque, cada vez más practicado desde el Mindfulness, en pacientes que presentan Trastornos de la Conducta Alimentaria, conocidos por sus siglas como TCA.
Cómo puede ayudar el mindfulness a las personas con TCA
En primer lugar, para acercarnos a la realidad de este tipo de pacientes hay que aclarar algunas de sus características más directamente relacionadas con la alimentación. Ya se ha explicado en artículos anteriores que este tipo de trastorno va más allá del hecho de “no querer comer para no engordar”, de modo que aquí nos centraremos en este rasgo para entender para qué puede servir Mindfuleating.
Las personas que sufren Anorexia se imponen un autocontrol estricto sobre la alimentación en forma de restricción. Perder peso es un fin en sí mismo y viven este logro como un triunfo y no como un problema, por lo que la motivación para abandonar la enfermedad es casi nula en la mayoría de los casos.
Por el contrario, las personas que sufren Bulimia y Trastorno por Atracón gestionan la obsesión por su cuerpo a través de ingestas alimentarias copiosas, seguidas de episodios de purga. Algunos autores describen estas pacientes como “anoréxicas frustradas” porque no pueden ejercer el control sobre la comida, como sí sucede en el caso de las pacientes anoréxicas.
Tanto en los trastornos relacionados con la restricción como con el descontrol alimentario, hay una dificultad en el manejo de las emociones, por un lado, y con las sensaciones interoceptivas, por otro.
Atendiendo a la primera de las causas mencionadas, observamos que les es difícil “sentir”. Existe un bloqueo emocional que les impide reconocer lo que están sintiendo, así como una cierta incapacidad para expresarlo; como consecuencia, es difícil aceptar lo que les pasa. Este bloqueo aparece en forma de miedo por no ser capaces de tolerar los sentimientos demasiados vívidos, si descubren un leve movimiento emocional. Las rumiaciones en este sentido son de tal calibre que producen un gran sufrimiento en sus creencias, pensamientos y emociones. Y es aquí donde el Mindfulness y el Mindfuleating tienen su efecto puesto que permiten reducir este tipo de pensamiento circular que provoca tanto sufrimiento a las personas que lo padecen.
En cuanto a la segunda de las causas, las interoceptivas, que están relacionadas con la información que viene del interior del cuerpo, vemos que existe, a su vez, una gran dificultad de cara a reconocer el hambre y la saciedad. El hambre puede ser confundida con la ansiedad o cualquier otra emoción y la saciedad puede parecer que ha desaparecido. En este escenario, la comida se convierte en un buen refugio que permite a la persona estar desconectada de su mundo emocional.
El Mindfulness aplicado al universo de la alimentación se llama Mindfuleating y consiste, como comentamos al principio, en utilizar el método de atención plena en el acto diario de alimentarse. Ello supone ser consciente de las emociones y, en particular, de si estas son las que van a decidir los alimentos que se van a elegir. Por ejemplo, si hay antojos e impulsos en el comer, si se diferencia entre hambre física y psicológica o si se va a identificar la saciedad.
Algunos resultados de la práctica del Minfuleating
Ya hay evidencia científica de la efectividad del Mindfuleating en la disminución de episodios de atracón, en la estabilización de la regulación emocional y en el autocontrol en el impulso de comer.
Aquí os exponemos las terapias psicológicas más habituales que usan Mindfuleating en los casos de TCA (García Palacios, 2016):
- Entrenamiento de Mindfulness para comer de manera consciente (MB-EAT) (Kristeller y Hallet, 1999). Es el primer estudio publicado diseñado para el Trastorno por Atracón. Está basado en el MBSR (Mindfulness Basado en la Reducción del Estrés), en la Terapia Cognitiva y meditaciones de imaginación guiada, enfocadas en la imagen corporal, el peso y las sensaciones físicas de apetito y saciedad. En una nueva revisión del programa se incluyen el entrenamiento en compasión.
- Terapia Dialéctica Comportamental (DBT) (Linehan, 1993). Es una adaptación del programa DBT para el trastorno límite de la personalidad dirigido a la Bulimia y trastorno por atracón. Está basado en la mejora de la regulación emocional y de la tolerancia al malestar, produciendo, con ello, una reducción de las conductas impulsivas automáticas.
- Terapia de Aceptación y Compromiso (ACT) (Hayes, Strosahl y Wilson, 1999). Es una intervención basada en aumentar la flexibilidad psicológica aprendiendo a estar en contacto con el momento presente de forma consciente y plena. Incluye estrategias de mindfulness y aceptación dirigidas hacia los pensamientos, imágenes y temores relacionados con la gordura.
- Terapia Cognitiva basada en Mindfulness (MBCT) (Segal, Williams y Teasdale, 2006). Es un programa que en su momento fue dirigido a prevenir las recaídas en pacientes con depresión. Después se adaptó para pacientes con Trastornos por Atracón. Se centra en el MBSR (Mindfulness basado en la reducción del estrés) de Kabat-Zinn (2004). Incluye técnicas para aprender a observar sin juzgar, para aceptar las sensaciones interoceptivas y propioceptivas corporales, así como las emocionales. Se trabaja la reducción de los pensamientos automáticos negativos, las conductas de evitación a las emociones y pensamientos que aparecen antes de un atracón aumentando la habilidad para detectar señales de hambre-saciedad.
- Mindfulness para la prevención del aumento de peso (EMPOWER) MB-EAT, Wolever (2007). Es un programa dirigido a personas con obesidad. Es un entrenamiento centrado en problemas médicos como la obesidad o la diabetes más que para trastornos alimentarios
Resumiendo, las terapias que usan mindfulness en TCA están dirigidas a la sintomatología relacionada con el descontrol alimentario, es decir, Bulimia, Trastorno por Atracón y Obesidad. Pocos son los estudios dedicados a la restricción alimentaria, siendo las técnicas de conciencia plena igualmente eficaces en pacientes con Anorexia que decidan practicar mindfulness. Ahora bien, existe una parte de estos pacientes que tienen una gran dificultad en conectar con su cuerpo a partir de estas prácticas de atención plena. El motivo puede ser el excesivo control que ejercen sobre sus sensaciones y emociones y el gran disgusto que les produce tenerlas.
Para terminar, con el fin de comprender mejor a las personas que padecen un TCA, haré una comparación entre las personas que lo sufren y las que no.
¿Quién no ha sufrido ansiedad o desrregulación emocional en algún momento de su vida? Hoy en día, gran parte de la población siente preocupación por su imagen corporal, por cuidar la alimentación, por hacer ejercicio. Todos estos síntomas que pueden darse en una persona sin TCA, se triplican o cuadriplican en una que sí lo sufre. Por tanto, desde el punto de vista alimentario, exista TCA o no, es recomendable practicar Mindfuleating para mejorar el sistema de salud general. ¿Te animas a probar? Para ello aquí te dejo una breve meditación que te conectará con un nuevo mundo de sensaciones a la hora de comer: hazlo con atención plena. ¡Buen provecho!
Y ahora, ¡a practicar esta meditación Mindfuleating!
Imagen | Unsplash